18 enero 2007

LA VANGUARDIA 17.01.07. Barcelona pone en marcha el Bicing, el nuevo sistema público de transporte individual

El alcalde prueba una de las bicicletas que estarán a disposición de los barceloneses a partir de marzo

El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, monta en bicicleta durante la presentación del nuevo servicio público

16/01/2007 Actualizada a las 16:23h
Barcelona.(EFE).- Barcelona contará desde el próximo mes de marzo con un nuevo sistema de transporte público individual en bicicleta que prevé poner a disposición de los ciudadanos y de forma progresiva 3.000 de estos vehículos antes de finales de año como medio alternativo para los desplazamientos urbanos. La empresa Clear Chanel -que cuenta con productos similares en ciudades como Oslo, Estocolmo o Reims (Francia)- ha sido la adjudicataria de este servicio municipal, bautizado cono Bicing, que permitirá a los barceloneses, gracias a unos abonos anuales (con un coste de 24 euros) o semanales (a un 1 euro), el uso de estos vehículos, que estarán ubicados en diferentes aparcamientos repartidos por toda la ciudad. Aunque los usuarios deben pagar por el uso de las bicicletas -que según el ayuntamiento tendrán una misión de transporte y no de ocio o turismo-, los costes principales del sistema (unos cuatro millones de euros anuales cuando funcionen las 3.000 bicicletas y los 200 aparcamientos) serán financiados por los excedentes de lo recaudado en 2006 por el Area Verde. Con el Bicing, el consistorio quiere promover la intermodalidad en el transporte, y por ello los aparcamientos de las bicis estarán situados junto a estaciones de metro o aparcamientos de la sociedad B:SM. El Bicing funciona por medio de una tarjeta de pago nominal y unipersonal que permite reconocer al usuario para que éste pueda recoger y dejar las bicicletas en los puntos habilitados para ello (que nunca estarán separados unos de otros por más de 300 metros). Los abonos posibilitan la utilización de las bicicletas durante 30 minutos seguidos, sin cargo, y cuantas veces al día lo requiera el usuario (entre las 05.00 y las 00.00 horas de domingo a jueves, y las 24 horas viernes y sábados) y cuando se sobrepase esa media hora, se prevé un recargo de 0,30 euros por cada 30 minutos más, hasta las dos horas, periodo máximo de utilización. Los datos de las experiencias que ya están en marcha en ciudades como Oslo o Estocolmo apuntan que la duración media de los trayectos realizados con estas bicis es de unos quince minutos, con recorridos de unos 2,5 kilómetros y con una media de diez usos diarios de cada uno de los vehículos que se ofertan. Las bicicletas, de acero y aluminio y de dimensiones adaptables a jóvenes y adultos, son ergonómicas y disponen de tres marchas, además de iluminación nocturna y de un número identificador para evitar robos, aunque existe un seguro de responsabilidad de 150 euros, que debería pagar el usuario en el caso de desaparición de la bicicleta.

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